Navidades en Islandia
Como ya hemos dicho en nuestro blog en otras entradas, Islandia es un país durante el verano y otro completamente distinto durante el invierno. Para las personas a las que les encantan las luces y la buena comida, disfrutar de las Navidades en Islandia será una experiencia inolvidable.
Navidades blancas en Islandia
El primer gran atractivo de experimentar las Navidades en Islandia es la posibilidad de tener un «white Christmas» – es decir: ¡unas Navidades con nieve! Si vienes de las regiones más cálidas de Europa o de América Latina, es posible que nunca hayas vivido el 25 de diciembre con nieve por la calle. En Islandia, eso es casi seguro y muy probablemente podrás sacarte aquellas fotos tal y cual las películas de antaño. El tiempo islandés permite apreciar toda la belleza de unas Navidades con nieve de ensueño. Cuanto más hacia el interior va el viajero, más seguro que encontrará un paisaje perfectamente blanco, pero incluso en Reykjavík es posible ver un escenario perfecto para las Fiestas.
Las Luces
Otro punto interesante de las Navidades en Islandia es la alegría con que los islandeses usan las luces de Navidad por las ciudades de la isla. En islandés, «Navidades» se dice «Jól» y ya era una época del año celebrada desde antes que el país se volviera cristiano. Como los días son muy cortos a finales del año y las noches son demasiado oscuras, la costumbre de decorar las casas con lucecitas navideñas que iluminan los caminos y calles de las ciudades y pueblos de la isla.
Además de las luces de Navidad, en Islandia también es posible contar con otras luces durante esta época: ¡las Auroras Boreales! Este fenómeno natural tan impresionante es particularmente bonito entre diciembre y enero, cuando las noches largas dan al viajero más posibilidades de verlas. Y si uno consigue ver las Auroras Boreales durante las Navidades en Islandia, uno puede considerarse una persona de mucha surte. Además, se llevará unas fotos espléndidamente mágicas para casa.
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Las tradiciones de las Navidades en Islandia
Las Navidades en Islandia empiezan, de verdad, 4 semanas antes del día 24 de diciembre. La tradición dice que las familias deben encender una vela cada domingo y que, para Nochebuena, la casa debe tener cuatro velas encendidas. Además, 13 días antes de Nochebuena, los chicos Yules empiezan a visitar los niños para entregarles pequeños regalitos en sus zapatos. Los chicos Yules son los 13 hijos de dos trolls, Grýla y Leppalúði, y no son gente tan buena como Santa Claus: aunque traigan regalos a los más pequeños de la casa, cada uno de los Yules es especialista en un tipo de travesura. Vestidos con sus ropas rojas y bancas, son esperados con mucha ansiedad por todos los niños islandeses. Como es tradición también en otros lugares del mundo, en Islandia hay un árbol de Navidad en casa. Ella llega el día 11 de diciembre y, debajo de ella, los regalos van siendo puestos durante los próximos días.
Las comidas navideñas islandesas
La comida de la isla es reconocida por todo el mundo y en Islandia también se come muy bien durante estos días. Además de las recetas propias de cada familia, es muy común que se ofrezcan galletas de jengibre, chocolate y galletas de licor. El día 23 de diciembre, conocido como Día de San Thorlaco, es muy común comer rayas fermentadas – las ciudades y pueblos de la isla ¡acumulan el olor a pescado hervido durante todo este día! Además, es muy tradicional comer el laufabrauð (pan de hojas), un pan muy fino cuya preparación suele involucrar toda la familia y sus diversas generaciones.
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